Edición 2015 / Páginas 204

Autor: SR. FLAVIO
Tema: NOVELA LATINOAMERICANA 
ISBN: 978-987-29652-6-6

EL AUTOR
Flavio Oscar Cianciarulo, conocido como Señor Flavio, nació en 1964, en Mar del Plata, Argentina. Es músico, compositor, escritor, conductor radial y productor artístico. A mediados de 1984, fundó con sus amigos Los Fabulosos Cadillacs, banda pionera de la New wave latinoamericana. Ha escrito gran cantidad de canciones, devenidas hoy en clásicos del rock hispano parlante y que lo llevaron a ganar distintos premios nacionales e internacionales. Entre ellas, “Matador”, “Manuel Santillán, el León”, “Mal Bicho” y “Vos sabés”. Hoy en día, sigue tocando con LFC y edita discos con otros proyectos paralelos como Sr. Flavio Band (solista), Misterio (agrupación que integra junto a su hijo Astor), Fuckdolls (banda punk en donde toca el bajo) y una ópera rock de reciente aparición llamada SARDINISTA! En su rol de escritor, se define como un anti-poeta new wave rocker hispano parlante. Colabora también como columnista en revistas internacionales de interés cultural como Warp de México y Zona de Obras de España. Entre sus obras publicadas encontramos: Rocanrol, canciones sin música (2005), una antología de cuentos y anti-poemas; The dead latinos (2007), su primera novela; Crónicas del León, diario de gira con LFC (2012) y Surfer calavera y otros cuentos de misterio (2013).

SINOPSIS
Era finales de mayo de 1986 y el invierno, según lo anticipaba el servicio meteorológico, sería largo y crudo en Mar del Plata; había que soportarlo de alguna manera. —Es muy simple —dijo Carlitos—; lo leí en una revista: hay que robar un silo de campo de esos que sirven para guardar cereales; después debemos conseguir una computadora gigante y el motor de un tractor, o de un Rambler ’65… se puede construir una nave espacial que podría llevarte al espacio exterior: es que siempre quise viajar a la luna, pero no tengo la responsabilidad suficiente para ponerme las pilas y estudiar astronáutica… sólo soy un bajista de punk rock y todo lo hago así nomás... Afirma uno de los protagonistas de La Máquina de Matar Pájaros, y plantea una máxima que se disparará luego a lo largo de la novela.